El candidato presidencial brasileño Eduardo Campos ha fallecido ayer, 13 de agoto, en un accidente de avión. Las encuestas le daban el 9% pero era un desconocido para los votantes de muchas partes de Brasil y era probable que recibiera más apoyos a medida que se desarrollara la campaña. Marina Silva, su compañera de campaña y ministra de medioambiente con Lula da Silva, se espera que asuma su lugar en los comicios. De cara al futuro, el desenlace trágico no altera nuestro caso base para las elecciones (una victoria estrecha en la segunda vuelta para la titular, Dilma Rousseff, contra el candidato de la oposición Aecio Neves) pero el giro de los acontecimientos arroja sin duda más incertidumbre a la carrera.
Por Joao Pedro Ribeiro.