El Banco Popular de China anunció otro recorte previsto del coeficiente obligatorio de reservas (RRR) el 9 de junio, dando pie a la especulación de que una ronda considerable de flexibilización política podría estar al caer. En nuestra opinión, la medida concuerda con las medidas modestas de estabilización que se han desplegado desde marzo para evitar una caída libre de la economía. Aunque el recorte del RRR ofrecerá un impulso a corto plazo al sentimiento, seguimos siendo pesimistas sobre el capital chino por el frágil sector inmobiliario y la oferta floja de crédito.
Por Mike Liu.