El crecimiento en el África Subsahariana continuará siendo sólido en 2014-15, experimentando una ligera aceleración como consecuencia de la fortaleza de la demanda interior, mientras que el comercio se beneficiará de la recuperación de los mercados desarrollados y la estabilización de los mercados emergentes. El mantenimiento de unas políticas fiscales relajadas en Ghana, Zambia y Nigeria (especialmente en el periodo previo a las elecciones de 2015) impulsará la actividad a corto plazo, lo que contribuirá a una aceleración de la inflación y un endurecimiento de las condiciones financieras. Dado que es probable que las monedas de mayor liquidez de la región experimenten una depreciación, los bancos centrales del África Subsahariana podrían verse obligados a adoptar unas políticas más restrictivas. Parece que Ghana volverá a subir los tipos de interés, ya que su subida de emergencia no ha logrado atajar la caída del cedi (GHS), lo que ha intensificado las presiones de los precios. Nuestras previsiones de crecimiento se sitúan por debajo de las del consenso, debido a nuestra opinión pesimista sobre Sudáfrica, donde las eficacias estructurales no resueltas limitarán un moderado repunte del crecimiento.
Por Maya Senussi y Rachel Ziemba.