Se especula bastante con que el ministro de economía George Osborne bajará los impuestos (una medida financiada con más recortes futuros del gasto) en los presupuestos de 2014-2015 (que se presentarán el 19 de marzo), con el objetivo de asegurar la recuperación y fomentar la victoria conservadora en las elecciones generales de la primavera de 2015. Los conservadores están tratando de definirse como "fiscalmente responsables" por oposición a un partido laborista "despilfarrador". Por ello, creemos que no es probable que Osborne anuncie recortes tributarios importantes en los presupuestos. Dicho eso, los presupuestos podrían ofrecer cierta clase de alivio fiscal que apoye a los exportadores, la inversión empresarial y los más afectados por la degradación del nivel de vida. Siempre que el gobierno se ciña al camino de la "responsabilidad fiscal", el riesgo crediticio integrado en las libras seguirá contenido. Es más, los mercados se preocuparán menos por las subidas tempranas de tipos y se aliviaría cierta presión sobre los bonos a corto plazo.
Por Brunello Rosa y Nouriel Roubini.