El tribunal constitucional alemán, en un intento de salvar la cara en un asunto muy delicado, ha optado por trasladar su decisión sobre si el programa de compra de bonos OMT compete al mandato del BCE al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). Al final, las OMT prevalecerán en su forma prevista, como manifestación de la disposición del BCE de ?hacer lo que haga falta? en vez de una receta detallada para implementar compras de bonos esterilizados condicionales e ilimitados. Las críticas alemanas al programa no son noticia y el hecho de que el parlamento alemán se sitúe entre las OMT y los estados miembros de la eurozona ya se ha establecido. Tras lo que será posiblemente una sentencia positiva del TJUE, el tribunal constitucional alemán podrá aceptar de mala gana las OMT y proteger su reputación, aunque es posible que decida limitar algunos aspectos del programa. El riesgo pendiente es la próxima decisión del tribunal de alemán sobre el MEDE el 19 de marzo, que podría echar más arena al engranaje.
Por Christian Odendahl
