El flojo arranque de los mercados emergentes en 2014 parece abrir algunas oportunidades en el extremo más corto de las curvas de rendimiento locales emergentes. En Brasil, Sudáfrica y México, los mercados parecen contabilizar demasiadas subidas en los doce próximos meses (de unos 75-100 puntos más que las previsiones de RGE), pese al ritmo gradual de normalización que se avecina. Es posible que esta reacción desproporcionada continúe en las próximas semanas y meses, planteando oportunidades para los inversores más ágiles, pero la estabilización de la inflación y una trayectoria más clara de la política estadounidense acabarán tirando hacia abajo del extremo corto de las curvas de rendimiento emergente. Seguimos siendo neutros sobre la deuda local (GBI-EM), donde anticipamos que una depreciación modesta de las divisas se verá compensada por el alcance y esperamos que los rendimientos a medio y largo plazo sigan subiendo.
Por Rachel Ziemba.