Las reestructuraciones de la deuda soberana en Grecia, Argentina, Chipre y otros países durante los últimos años han alentado los intentos del sector oficial por revisar el proceso de reestructuración en sí mismo. El intento más destacado ha sido una propuesta del FMI para establecer unos requisitos de recapitalización interna para los acreedores privados como condición para recibir ayuda del Fondo, dejando que el tiempo determine si el país tiene un problema de liquidez o de solvencia. No obstante, como ya hemos sostenido con anterioridad, una posible revisión de los mercados de deuda soberana es innecesaria y poco probable, aunque la introducción cláusulas de agregación y de condiciones más estrictas para recibir ayuda del FMI parecen unos resultados razonables que no provocarían graves trastornos en el mercado de bonos.
Por Joao Pedro Ribeiro.