El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, anunció ayer una bajada en el tramo autonómico del IRPF que afecta a 7 de cada 10 gallegos. Se reduce medio punto el tipo impositivo -del 12 al 11,5- de aquellos que tienen una base liquidable de 17.700 euros. La oposición critica que sólo tendrá un impacto de 84 euros anuales por contribuyente, pero es un gesto significativo. Reducir el IRPF va en la línea de lo que se ha de hacer para estimular el consumo y la actividad económica. Además, Feijóo no espera a 2015, como el Gobierno central, para adoptar esta decisión. Galicia ha afrontado con más holgura que otros la reducción de desequilibrios presupuestarios y ello le permite adelantarse y marcar el camino que hay que seguir.