El Reino Unido registró varias sorpresas al alza en el tercer trimestre, lo que hace que incrementemos nuestras previsiones de crecimiento para los años 2013 y 2014 hasta el 1,4% y el 1,9%, respectivamente. La actividad ha pasado claramente del modo de "rescate" al modo de "recuperación", y la estrategia de crecimiento a corto plazo del gobierno está impulsando la economía hacia la velocidad de escape, con un fortalecimiento de la libra esterlina y los activos de riesgo (propiedades, renta variable y crédito). Los obstáculos estructurales siguen estando ahí, y la transición del Reino Unido al nuevo modelo de crecimiento será larga y con altibajos. Las increíblemente altas lecturas recientes de los índices PMI reflejan una recuperación tras los bajos niveles anteriores, lo que hace que seamos más prudentes que el consenso en lo que respecta a las perspectivas para la actividad económica. Las "injustificadas" subidas de los rendimientos a corto plazo podrían terminar por exigir una respuesta por parte del Banco de Inglaterra con el fin de garantizar la continuidad de la recuperación.
Por Brunello Rosa, Ibrahim Gassambe y Dayna Goodwin.