Mantenemos nuestro optimismo sobre la inversión privada no residencial de Japón, pese al error de cálculo temporal de nuestros pronósticos para la primera mitad de 2013. Los principales indicadores siguen sugiriendo un repunte sustancioso en la segunda mitad del año y esperamos que un bonito bache en el rendimiento de los títulos japoneses coincida con la aceleración de la inversión. Se espera que las acciones industriales, de IT, telecomunicaciones y energía sean las más beneficiadas de la recuperación de los gastos de capital. La sanidad y el consumo discrecional podrían presentar un rendimiento inferior relativo por la incertidumbre política en ambos sectores. Aunque no sea el motor predominante del rendimiento del mercado de capital, una debilidad adicional del yen a finales de año ofrecerá un agradable viento a favor para la clase de activos de capital en general, hasta entrado 2014.
Por Michael Manetta.