Si analizamos la subida del impuesto sobre el consumo de 2014, el gasto real del gobierno tendría que aumentar en torno a un sólido 2,7% interanual en el ejercicio fiscal 2014 para generar 0,7 puntos porcentuales de crecimiento real, lo que compensaría por completo el lastre del consumo, si todo lo demás continúa igual. Sin embargo, el gasto público real sólo ha aumentado más de un 2% en un año fiscal en dos ocasiones a lo largo de los últimos 17 años: en el ejercicio fiscal 2009, después de la crisis, y en el ejercicio fiscal 2012, debido a las reconstrucciones relacionadas con el tsunami. El gobierno se ha comprometido a mantener la emisión de nueva deuda en el mismo nivel de 2013 o por debajo del mismo (aproximadamente 43 billones de yenes) en el ejercicio fiscal 2014, lo que significa que el primer ministro Shinzo Abe tendrá dificultades para mantener sus múltiples compromisos fiscales y ofrecer algo que se acerque a una compensación total de la subida del impuesto sobre el consumo. Esto refuerza nuestra opinión de que el crecimiento de 2014 será algo más lento que en 2013, tanto en términos de año natural como de ejercicio fiscal.
Por Michael Manetta