El déficit fiscal de Malasia se situó en el 6,4% del PIB en el primer trimestre, lo que refuerza nuestras expectativas de que el país superará su objetivo de déficit del 4% del PIB este año, un resultado que es especialmente probable si el crecimiento no cumple con las expectativas en el segundo semestre, al igual que en el primer trimestre. No obstante, nuestro verdadero motivo de preocupación reside en el reciente aumento de la deuda semipública (es decir, la deuda privada garantizada por el gobierno, que actualmente se encuentra en el 65% del PIB), una tendencia que hará que el país sea todavía más vulnerable a la desaceleración de la economía china durante los próximos 12 a 18 meses. Asimismo, el ratio entre la deuda total y el PIB de Malasia se está acercando peligrosamente a la barrera del 55%, y los costes de servicio de la deuda aumentarán a partir de ahora a medida que los tipos de interés a largo plazo comiencen a incrementarse.
Por Ayoti Mittra
