En un movimiento telegrafiado, el pasado viernes el Banco Popular de China puso fin a la práctica de establecer un suelo para los tipos de interés deudor de los bancos, lo que supone un pequeño avance hacia una mayor liberalización del sector financiero. El impacto sobre el crecimiento del crédito (la gran mayoría de los préstamos se ofrecen al tipo de préstamo del Banco Popular de China o por encima del mismo) o sobre los márgenes de beneficio de los bancos (es poco probable que los bancos comiencen a ofrecer descuentos importantes, ya que sigue existiendo un límite para el tipo de depósito) será pequeño, y no creemos que haya cambios en nuestra previsión para el segundo semestre. La liberalización del tipo de depósito, que esperamos que se ponga en marcha de forma gradual durante los próximos años, tendría un mayor impacto, lo que ayudaría a incrementar la rentabilidad del ahorro para los hogares y reduciría ligeramente la tasa de ahorro. No obstante, los bancos tendrían mayores dificultades para enfrentarse a este movimiento, ya que los márgenes de interés neto se verían afectados en un momento en el que esperamos un incremento de los préstamos improductivos. Por ello, la creación de un seguro de depósito supone un paso fundamental.
Por Adam Wolfe.