Desde hace mucho tiempo venimos sosteniendo que el crecimiento en EEUU, deteriorado por un considerable arrastre fiscal, iba a fallar este año. El consenso ha disminuido paulatinamente hasta converger con nuestro pronóstico de un crecimiento del 1,8% en 2013. En estos momentos esperamos que la economía presente mejoras modestas a finales de 2013 y entrado 2014, a consecuencia del menor arrastre fiscal, la actividad de apoyo al sector inmobiliario y un consumo estable. Estamos observando muy de cerca el crecimiento en la segunda mitad en busca de sorpresas. Si nuestro escenario de crecimiento moderado se atiene a lo previsto, estaremos a gusto con nuestras predicciones para 2014 y seguiremos pendientes de otros riesgos al alza. De lo contrario, vemos riesgos a la baja para nuestra opinión de crecimiento y el consenso seguramente siga recortando sus pronósticos.
Por Prajakta Bhide.