La India logró superar su objetivo del déficit fiscal en el ejercicio fiscal 2013 (abril-marzo), recuperando suficiente credibilidad como para que Fitch mejorara su opinión soberana para el país, de "negativa" a "estable" en junio. Aun así, el coste del combustible y los programas de subsidios de alimentos, junto con la depreciación del INR, amenazan con deshacer gran parte de los progresos que India ha conseguido en materia de consolidación fiscal. Con la moneda perdiendo valor y los precios del crudo en modesto ascenso, las pérdidas del estado en ventas de diesel han vuelto a los niveles del tercer trimestre de 2012, suprimiendo en efecto las ventajas fiscales de las subidas sucesivas del precio del diesel. A la carga de los subsidios se suma la nueva ley nacional de seguridad alimenticia que, además de impulsar la demanda rural, promover la inflación y ampliar el déficit de cuenta corriente, podría obligar al gobierno a pasarse de su objetivo del déficit fiscal en el ejercicio fiscal 2014.
Por Alex Etra.