La pasada semana, la India hizo público un déficit por cuenta corriente del 3,6% del PIB para el cuarto trimestre de 2013, inferior al 6,7% registrado en el tercer trimestre y por debajo de la estimación del consenso de aproximadamente el 4%, lo que supuso un cierto apoyo para la INR. Los datos acerca de la posición de inversión internacional neta y de la deuda exterior del país fueron menos alentadores, y mostraron que la calidad de su financiación exterior sigue deteriorándose debido al aumento de las inversiones de cartera y otras inversiones (especialmente deuda) y la disminución de la inversión extranjera directa. Dado que se espera que los flujos de capitales hacia los mercados emergentes disminuyan en 2013 y 2014 a medida que la liquidez de los mercados desarrollados se reduzca gradualmente, es probable que las grandes necesidades de financiación exterior de la India mantengan a la INR bajo presión a pesar de la reducción del déficit por cuenta corriente durante este año. La decepcionante actividad económica y la debilidad de la INR amenazan con mantener a la India sumida en un equilibrio retroalimentado de bajo crecimiento.
Por Alex Etra.