El PIB de Francia se contrajo un 0,2% intertrimestral en el primer trimestre, un resultado ligeramente por encima de nuestra previsión (-0,3% intertrimestral) y de las expectativas del consenso (-0,1% intertrimestral). El crecimiento del cuarto trimestre experimentó una ligera revisión al alza, debido principalmente a la mayor resistencia del consumo privado. Revisamos levemente al alza nuestra previsión para 2013, aunque mantenemos invariable nuestra previsión para 2014: el lastre fiscal y el debilitamiento de los estabilizadores automáticos mantendrán a Francia en recesión durante el segundo trimestre, con una estabilización de la economía en el segundo semestre y el regreso a un débil crecimiento positivo en 2014 a medida que se atenúe la austeridad. Francia esté perdiendo competitividad frente a algunos de sus principales competidores de la Eurozona, y sus dificultades económicas persistirán. El gobierno se está moviendo en la dirección adecuada en lo que respecta a las reformas estructurales (aunque lentamente), y es posible que Francia continúe siendo un refugio seguro dentro de la región.