Tras la reciente liquidación de bonos del Tesoro, RGE investiga las señales del fin del mercado alcista secular de bonos como escenario de riesgo, aunque no es nuestro escenario básico, ya que el panorama técnico permanece intacto, el mercado no cuenta con rendimientos a mucho más largo plazo en los dos próximos años, ni a corto plazo tampoco, y la política monetaria y velocidad de escape rebaten una revisión. Nuestro caso básico cuenta con que el rendimiento a diez años cerrará el año cerca de la franja inferior del 2,0-2,4%, mientras que a medio plazo un aumento anual de 20-30 puntos está asegurado, aunque ya se tiene en cuenta en el mercado de bonos. Con una sorpresa al alza del crecimiento (liderada por las viviendas, la inversión corporativa y el consumo) que compensa con creces el arrastre fiscal del embargo y parece auto sostenida, podríamos ver cómo el rendimiento a diez años sube hacia la marca del 3% a final de año. El diferencial entre el Tesoro y el Bund a diez años se ensanchará más en los próximos meses, lo que refleja los caminos divergentes del crecimiento.
Por Brunello Rosa.