Desde el tercer trimestre de 2012, la liquidez interbancaria en la India ha sido bastante restrictiva, con préstamos de los bancos de cerca de un billón de INR de la línea de ajuste de liquidez del Banco de la Reserva de la India (RBI), muy por encima del umbral del banco del +1% de demanda neta y pasivo a plazo. Aunque el RBI ha reiterado que prefiere mantener la liquidez en déficit para suavizar la transmisión monetaria, ha empleado operaciones monetarias puras y duras, y recortes del índice de reserva de efectivo para tratar de aliviar una liquidez excesivamente estricta, y garantizar que los recortes del tipo se transmitan a los mercados del dinero y tipos cortos, para finalmente agregar la demanda mediante el canal de préstamos del banco. La esperadísima caída de los balances de efectivo del gobierno en el RBI se hace obvia en los datos de abril y debería bastar, junto al aumento de flujos de entrada de capital, para aliviar la liquidez estricta. Descontamos los factores estacionales, que sugieren que el problema es estructural además de cíclico.
Por Alex Etra.