El PIB chino se expandió muy por debajo del consenso, con un 7,7% interanual en el primer trimestre de 2013, muy lejos de los pronósticos y de la expansión del 7,9% en el cuarto trimestre (una expansión anualizada ajustada estacionalmente del 6,4% intertrimestral, frente al 9,5% intertrimestral del cuarto trimestre). Mantenemos nuestra previsión de crecimiento del 7,6% para el año (con riesgos ahora algo a la baja) y esperamos que el consenso se mueva rápidamente hacia nuestro pronóstico en las próximas semanas. El crecimiento debería mantenerse relativamente bien en el segundo trimestre gracias a los efectos de base manufactureros de apoyo, unas condiciones sumamente relajadas de crédito en el primer trimestre, la ampliación del IVA a los servicios y las repercusiones positivas del mercado inmobiliario. Aun así, seguimos creyendo que el crecimiento caerá con más gravedad en la segunda mitad de 2013 cuando los factores que apoyarán el crecimiento en el segundo trimestre se desvanezcan y los vientos en contra aumenten (mantenemos que los precios inmobiliarios empezarán a volcarse en el tercer trimestre y no prevemos que el Banco Popular de China facilite las condiciones monetarias a mitad de año, como lo hizo en 2012, para sostener el crecimiento).
Por Adam Wolfe
