Tras divergir en 2012, el crecimiento convergerá en toda la región durante los dos próximos años, con la gran excepción de China. Las políticas de reflación de Japón se suman a los riesgos de crecimiento al alza en 2013, mientras que la ralentización de la inversión china afectará al crecimiento regional a finales de 2014. India seguirá atascada en la "estanflación". En el resto, la inflación sigue deprimida, aunque los riesgos al alza se acumulan, al igual que la preocupación de los bancos centrales por las burbujas y la inestabilidad financiera. Excepto en Japón, este año la política fiscal y monetaria continuará siendo relativamente prudente. Los bancos centrales del sureste asiático, en especial de Malasia, serán los más duros este año y hasta 2014, mientras que Corea del Sur y la India parecen las más propensas a facilitar más. Los bancos centrales tendrán espacio para facilitar a finales de 2014, cuando la ralentización de la inversión china se propague por el resto de la región. Los regímenes costosos de prestaciones seguirán vigentes este año, aunque podrían empezar a abordarse en 2014 o 2015, cuando las elecciones en Malasia, Filipinas, Indonesia y la India concluyan dentro de 15 meses.
Por Abe Michael Manetta, Ayoti Mittra, Adam Wolfe, Alex Etra e Ibrahim Gassambe.