Ya ha salido la inflación de Brasil en diciembre de 2012 (IPCA): 5,84% interanual (0,79% intermensual), empujada sobre todo por los precios de los alimentos, ropa y gastos personales. Hemos recalcado (hasta el agotamiento) nuestra previsión de la dinámica inflacionaria, en una opinión cada vez más adoptada por el consenso durante 2012. La subida de los precios de los alimentos se suma al hecho de que los embotellamientos en el lado de la oferta, un estímulo sobre-agresivo orientado a la demanda, unos mercados laborales ajustados, las altas ganancias salariales y bajo crecimiento de la productividad, unido ahora a una moneda dirigida y depreciada, resultarían en presiones endógenas sobre los precios. La historia de la inflación en 2013 es menos alentadora todavía, ya que el estímulo fiscal dirigido y un crecimiento económico mayor se añaden al total, con el banco central (BCB) manteniendo los tipos por debajo de los niveles neutros (pese a las subidas de tipos que esperamos que se produzcan en la segunda mitad) durante el año. Esta dinámica explica nuestra opinión fuera de consenso sobre la inflación para 2013 (6,3% interanual). Esperamos que la opinión de consenso suba pronto.
Por Juan Lorenzo Maldonado.