Los datos puros y duros siguieron decepcionando esta semana, confirmando que la recuperación de Asia se ha retrasado hasta el cuarto trimestre. Mostrando su preocupación, algunos bancos centrales asiáticos siguieron el ejemplo de la Fed y del BCE y anunciaron una política de flexibilización: En línea con nuestro punto de vista opuesto, el Banco de Japón extendió su programa de compra de activos en 10 billones de yenes japoneses más en la reunión de septiembre, mientras el banco central de Taiwan eligió mantenerse en espera esta semana, aduciendo la inflación. El primer ministro indio, Manmohan Singh, anunció unas largamente esperadas reformas que pueden finalmente dar un impulso a la flaqueante economía india, que se frenó hasta su mínimo en tres años en el primer trimestre del ejercicio 2012 -las "reformas del big bang" incluyen liberalizar la inversión extranjera directa (FDI) en las minoristas multimarca, con una cláusula de exención para estados individuales. Unida a la flexibilización monetaria mundial, la reforma de la FDI ayudará a India a atraer flujos de capital muy necesarios para financiar el déficit por cuenta corriente.
Por Ayoti Mittra, Michael Manetta y Adam Wolfe.