El lento crecimiento del consumo, reforzado por el inicio del desapalancamiento, arrastrará a la baja el sentimiento empresarial y la inversión, y el crecimiento se mantendrá muy por debajo de la tendencia con un 1,7% intertrimestral tasa anual desestacionalizada en 2012 y un 1,3% en 2013. El aumento de los esfuerzos por frenar los precios inmobiliarios podría acelerar y acentuar el proceso de desapalancamiento, mientras que la débil trayectoria de la inflación y el descenso del crecimiento harán que el Banco de Canadá se mantenga a la espera. Las sombrías expectativas para el crecimiento tanto a nivel nacional como mundial podrían obligar a las autoridades fiscales a postergar la consolidación planificada, reduciendo el lastre del gasto público en 2013. La menor exposición de Canadá a China (con respecto a Australia) a través de los canales comerciales, la presencia de la energía en su combinación de materias primas y el anclaje de los tipos de interés a corto plazo sugieren que los resultados a corto plazo serán mejores que los del AUD.
Por Dev Ashish, Rachel Ziemba, Natalia Gurushina y Jennifer Kapila.