La mayoría de los datos económicos publicados por China correspondientes al mes de agosto sugieren que el crecimiento ha seguido desacelerándose en el tercer trimestre, aunque existen algunos motivos para el optimismo. Los datos de la producción industrial subyacente sugieren que el crecimiento se puede estar estabilizando, debido a que la generación de energía y la producción de cemento han experimentado una ligera mejora. La producción industrial general se vio lastrada por la producción de acero, la cual experimenta dificultades debido al exceso de inventario pero que debería seguir los pasos de la energía y el cemento en los próximos meses, y por la producción de automóviles, para la que los efectos de base serán más favorables en el futuro. Esperamos una cierta mejora del crecimiento secuencial en el mes de septiembre, cuando la flexibilización monetaria y fiscal empiece a hacer efecto y se apliquen las nuevas medidas de ayuda a las exportaciones y los servicios.
Por Adam Wolfe
