Los mercados del petróleo han ignorado sus temores iniciales acerca del huracán Isaac, regresando a la tendencia a la baja para los precios del petróleo iniciada el pasado viernes. Si bien la trayectoria de Isaac sigue siendo incierta (siempre podría regresar girando a través del Golfo de México, interrumpiendo la producción de petróleo y gas o perturbando la capacidad de refinado en tierra), Estados Unidos es ahora más resistente a las contracciones de la oferta en el Golfo de México o en la Costa del Golfo que en 2008 o 2010. La producción de petróleo en los yacimientos marinos del Golfo de México se ha estancado, mientras que la producción de petróleo a partir de esquistos y petróleo de formaciones compactas en tierra ha experimentado un fuerte aumento. Este incremento de la producción, especialmente de gas natural pero también de petróleo, hace que el país esté mejor abastecido, aunque la demanda de combustible continúe muy por debajo de sus niveles máximos.
Por Rachel Ziemba.