Está previsto que el primer ministro Najib Tun Razak convoque elecciones en septiembre u octubre tras el anuncio de otro presupuesto populista para 2013. Aunque las ayudas en efectivo han aumentado la popularidad de Najib, su partido Barisan Nasional (BN) debe hacer frente a las críticas que le acusan de lentitud en las reformas económicas y políticas. Dadas las elevadas probabilidades de que el BN no vuelva a obtener una mayoría cualificada en el parlamento, los inversores extranjeros podrían considerar que la prima de estabilidad política ha desaparecido, lo que provocaría la volatilidad del mercado bursátil. Esperamos que el gobierno supere su objetivo de déficit fiscal del 4,7% en 2012, ya que las elecciones han hecho que la consolidación fiscal pase a un segundo plano. Las agencias de calificación crediticia han apuntado la posibilidad de una rebaja de sus calificaciones si el gobierno no adopta medidas para reducir la relación entre la deuda y el PIB, que podría superar fácilmente el límite máximo del 55% en 2013.
Por Ayoti Mittra y Derrick Metriyakool.
