A partir del martes se dejarán de aceptar las garantías griegas respaldadas por el estado para las operaciones de liquidez del BCE, hasta que la troika finalice la actual revisión del progreso registrado en el segundo proceso de ajuste. Mientras tanto, el BCE señala que ?las necesidades de liquidez pueden ser solucionadas por el banco central nacional pertinente?, es decir, a través de la asistencia de liquidez de emergencia. A fecha de junio, los bancos griegos habían recurrido a la asistencia de liquidez de emergencia por un importe de hasta 61.000 millones de euros (aproximadamente el 15% de los activos) y casi todo el crédito del BCE ha sido llevado a las operaciones principales de financiación (OPF, 70.500 millones de euros, OFPML, 3.100 millones de euros). De este modo, el componente de OPF en el balance del BCE experimentará un incremento de la volatilidad en el futuro.
Por Elisa Parisi-Capone.