Finalmente, el Banco de la Reserva de Australia (RBA) está enmendando el error político que lleva cometiendo desde comienzos de año, cuando sus esperanzadoras declaraciones acerca de la salud de la economía convencieron a la junta de gobernadores para que mantuviese los tipos de referencia al contado. Entonces defendimos que era necesario un recorte de los tipos para evitar una grave corrección del mercado inmobiliario, aunque el RBA no tomó cartas en el asunto hasta después de la publicación de los decepcionantes datos del mes de abril, con un recorte 50 puntos básicos en mayo. Poco después predijimos que en junio tendría lugar un nuevo recorte de 25 puntos básicos, debido a que el banco central intenta regresar a la curva. Ese recorte tuvo lugar ayer, y creemos que todavía se producirán nuevas reducciones por valor de 50 puntos en el tercer trimestre a medida que las dificultades del mercado inmobiliario y las condiciones externas continúen afectando tanto al sentimiento como a la actividad.
