El índice IPCA brasileño aumentó un 0,64% intermensual en abril, tras un 0,21% intermensual en marzo. Sin embargo, los efectos de base favorables mantuvieron la inflación interanual contenida en el 5,10%, dentro de la banda objetivo del banco central del 4,5% +/-2% interanual y en línea con la opinión de RGE de que los precios continuarán desacelerándose a corto plazo. Los datos de abril sugieren que los precios de los bienes comerciables, el principal factor que reduce la inflación general, se están estabilizando. Lo que es más importante, la inflación subyacente y la inflación de los bienes no comerciables (servicios) siguieron siendo elevadas o aumentaron durante este pasado mes. Seguimos esperando que la inflación comience a acelerarse en el segundo semestre a medida que la economía regrese al crecimiento potencial, liderada por la demanda interior, dado que los factores estructurales que provocan el aumento de la inflación no han sido solucionados.
