El índice Markit del PMI manufacturero del Reino Unido descendió al 50,5 en el mes de abril desde el 51,9 de marzo como consecuencia de una caída en los nuevos pedidos de exportaciones debido a la recesión de la Eurozona, que representa aproximadamente la mitad de las exportaciones totales del Reino Unido. Para conseguir mantener el crecimiento, los fabricantes deberán aumentar la demanda externa y centrarse en los mercados de fuera de la precaria Eurozona, aunque la esperada normalización del crecimiento de los mercados emergentes ante un posible crecimiento negativo estadounidense ralentizará la demanda de exportaciones del Reino Unido. Si la demanda externa no aumenta, los sectores aumentarán su dependencia de la economía interna, menoscabada por las medidas de austeridad así como por una indolente confianza de las empresas y de los consumidores.