Después de que los rendimientos de los bonos alcanzaran un nuevo máximo del 5,91% en la subasta pública del pasado 4 de abril, el gobierno español anunció recortes en los sistemas sanitario y educativo del país por valor de 10.000 millones de euros, en un esfuerzo por minimizar la ineficacia en los servicios públicos y recuperar la confianza de los mercados. Mientras que los rendimientos de los bonos hacen que el endeudamiento resulte cada vez más costoso para el gobierno español, el probable impacto negativo que tendrán los recortes sobre el crecimiento económico hará que, en nuestra opinión, sea casi imposible que España ni tan siquiera logre alcanzar el objetivo de déficit más relajado del 5,3% para 2012. España sigue siendo extremadamente vulnerable ante una variación repentina de la confianza de los mercados.
