En su reunión de enero, el Comité de Operaciones de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) mantuvo las políticas acomodativas existentes, pero alargó el compromiso de mantener el tipo de los fondos de la Reserva Federal en unos niveles bajos hasta finales de 2014, prolongando el anterior compromiso fijado en mediados de 2013. En una apuesta por mejorar la claridad de su política, la Reserva Federal declaró oficialmente que su objetivo a largo plazo es una tasa de crecimiento del 2% anual para la inflación del gasto de consumo personal, remarcando que la estabilidad de los precios y el empleo máximo seguían siendo obligaciones al mismo nivel. La prolongación del compromiso, junto con las declaraciones del presidente Bernanke, siguen respaldando nuestra opinión de que tendrá lugar una nueva flexibilización.
