El plan presupuestario de Arabia Saudita, anunciado el 26 de diciembre, supone un cambio de tendencia en un aspecto importante: es la primera vez en la última década que el reino planea gastar menos el próximo año que el año anterior. De ponerse en práctica (RGE cree que será difícil que las autoridades económicas puedan mantener a raya el gasto dadas las presiones tanto nacionales como a nivel mundial), agravaría la desaceleración del crecimiento de Arabia Saudita para próximo año (con respecto a la estimación oficial del 6,8% incluida en los documentos presupuestarios). Como en los últimos siete años, es probable que el gasto supere al presupuesto, incluso después del récord total del último año.
Por Rachel Ziemba
