El gabinete japonés ha aprobado un borrador de presupuesto para el ejercicio 2012 que fijará el gasto en 90,3 billones de yenes (1,2 billones de dólares estadounidenses), lo que supone un ligero descenso con respecto al presupuesto de 92,4 billones de yenes para el ejercicio 2011. La propuesta presupuestaria inicial no incluye el gasto de la reconstrucción, gran parte del cual ya ha sido asignado en los tres primeros presupuestos complementarios del ejercicio 2011, ni reduce el importe de deuda bruta que el gobierno deberá emitir en el nuevo ejercicio.