El volumen de las ventas minoristas en el Reino Unido (sin incluir el combustible) correspondiente al mes de noviembre cayó un 0,7% intermensual, en lo que supone la mayor desaceleración desde el mes de abril. Prevemos que la demanda de los consumidores, que representa aproximadamente el 65% del PIB, continúe siendo moderada en 2012 y 2013 debido al trasfondo de significativas limitaciones del crédito, debilitamiento de la confianza de los consumidores, desapalancamiento continuo y estancamiento del mercado inmobiliario residencial. Una pronunciada caída de la inflación podría dar lugar a una cierta mejora del gasto de los consumidores en 2012, y la celebración de los Juegos Olímpicos de 2012 en Londres podría potenciar de forma limitada las ventas minoristas, aunque los altos niveles de endeudamiento de los hogares restringirán el gasto privado.