Esperamos que el PIB de la Eurozona crezca un 1,4% en 2011, antes de contraerse un 0,8% en 2012 y otro 1,8% en 2013. Estas cifras han sido calculadas suponiendo la quiebra y salida ordenada de la Eurozona de Grecia para finales de 2012 y la reestructuración ordenada de la deuda en Italia para finales de 2013. La demanda interior será un importante lastre para los resultados económicos durante los próximos dos años, a medida que los gobiernos apliquen programas de austeridad, la confianza empresarial y de los consumidores se desplome, el desempleo siga aumentando y el crédito se restrinja.
Por Megan Greene.
