En su reunión del 25 de octubre, el Banco de Canadá (BC) instituyó la novena pausa directa, tras tres incrementos consecutivos en la política de tipos a mediados de 2010, haciendo hincapié en las débiles perspectivas de crecimiento global. La retórica de la reunión coincide con las expectativas de RGE de que el banco central se empiece a preocupar por el crecimiento, pero sin indicar recortes. La reciente moderación de los precios de la energía, ha aliviado la presión sobre la inflación, permitiendo al BC permanecer al margen por más tiempo, hasta principios de 2013, en opinión de RGE.