A corto plazo, los riesgos macroeconómicos y de política de la zona euro y Estados Unidos aumentan los peligros para el crecimiento mundial. Mientras los mercados desarrollados se encuentran en punto muerto, el limitado número de cartuchos políticos eleva los riesgos de recesión. A medio plazo, el reequilibrado gradual (con escaso margen) sigue siendo nuestro supuesto básico, dando por hecho que las respuestas de política sean apropiadas y que la zona euro evite el incumplimiento desordenado. Pero la demanda se quedará corta de lo que hace falta para llenar los vacíos de rendimiento en los mercados desarrollados, la normalización de la política se mantendrá lenta y el crecimiento irá por debajo de su potencial.
Por Christian Menegatti, Rachel Ziemba y el equipo de investigación económica de RGE