El 13 de julio se comunicaron tres explosiones en las zonas más pobladas de Bombay durante la hora punta, dejando al menos 18 muertos y varios heridos. No está claro si ha sido un atentado de una organización terrorista o un grupo más pequeño. Aunque las ciudades más grandes de la India se han declarado en estado de alerta máxima, hasta el momento no hay pruebas de que Bombay se enfrente a un atentado parecido al de noviembre de 2008.