Estos días, las hermanas Botas han trasladado su empresa y casi su casa a Ifema. No en vano, están presentes en la feria que se celebra estos días en el recinto ferial madrileño, Intergift, y saben que éste es no sólo un buen canal de ventas, sino también una forma de conseguir puntos de venta para sus muebles. Están pasando por un momento crucial con su empresa, afectadas, cómo no, por la crisis y pensando en reinventarse para salir adelante con el proyecto que iniciaron hace ya varios años.
¿Qué hacen dos hermanas montando una empresa? (MB). La historia de la empresa empezó hace 30 años y la montaron unas amigas mías. Hacían muebles pintados a mano y como yo estudié Bellas Artes les echaba una mano. Pero quisieron dejarlo allá por 1994.
(LB). Yo, que estudié Derecho, estaba harta demi trabajo. Y cuando me quedé embarazada decidí dejarlo y unirme a ella. El problema es que lo que dejaron estaba en quiebra, así que retomarla fue mucho más complicado de lo que parecía. Nos quedamos sólo con el activo de la marca. Y eso fue lo más duro, sin duda, la cantidad de pufos que había.
Pero arrancaron...
(LB). En aquel momento era algo ilusionante. Abrimos en Madrid y vimos que aquello funcionaba. Hablamos del año 1994. Así que empezamos a franquiciar y llegamos hasta 18.También entramos en Portugal con un máster franquicia y en un año conseguimos 14. Pero la realidad es que para nosotros la franquicia ha sido un problema, no daba suficiente dinero al franquiciado.
En todo caso, las cosas no les han ido nada mal...
(LB). Llegamos a tener 40 puntos de venta, prácticamente en todas las provincias. Aún recuerdo que fuimos a Dubai a una feria del mueble y fue la risa. La cama más pequeña era de 2x2 metros, comparado con lo nuestro...
(MB). Y nos ha ido bien con el tema de la página web, y eso que pensábamos que no iba a funcionar demasiado.
Muchos empresarios dicen que las ferias son un buen canal de venta. ¿Están de acuerdo?
(LB). Las ferias nos han funcionadomuy bien, en general Intergift e InteriorHome. De hecho, nos han ayudado a conseguir muchos puntos de venta.
Con la llegada de Ikea a nuestras vidas, las revistas demuebles, el ?boom? inmobiliario... todos estos cambios se habrán trasladado a sus diseños, ¿no?
(MB).Hemos cambiado mucho las líneas. Al principio era todo mueble pintado a mano, azul y rosa. Cada vez se pinta menos y con líneas más rectas. Hay mucha más sobriedad.
(LB).De todos modos, no nos tienen por qué afectar cosas como Ikea. Nosotros hacemos otra cosa,muebles para toda la vida.
La crisis, y perdonen la escasez de originalidad de la pregunta, ¿cómo les está afectando?
(LB).Mucho.Han cerrado muchos de nuestros puntos de venta.La verdad es que es tristísimo. Así que estamos pensando en reinventarnos. Quizá sacando una segunda línea de muebles más baratos, aunque no sabemos exactamente ni cómo ni cuándo. Y desde luego ahora es un buen momento para encontrar locales con una ubicación muy buena. Estamos en un momento crucial de la empresa.
Llevan mucho tiempo como empresarias, desde una época en la que a lo mejor no era tan habitual. ¿Alguna vez han notado ciertos obstáculos por ser mujeres?
(LB). Nunca nos han dejado de dar un crédito, pero es cierto que al principio los que nos presentaban al del banco eran nuestros maridos. Aunqueme imagino que también a ellos se lo presentó un amigo.
¿Cómo recibió su entorno la noticia de que querían ser empresarias? ¿Alguien se echó las manos a la cabeza?
(LB).Afortunadamente nuestro entorno siempre nos dio ánimos y de hecho querían participar en nuestro proyecto. Estaban encantados.
¿Se arrepienten de la decisión?
(LB) No, aunque es cierto que la realidad te hace ver las cosas de otra forma. Yo pensaba que iba a trabajar menos y ha sido justo todo lo contrario. Pero al menos me manejo yo el tiempo.No sé si sería capaz de volver a una oficina y aguantar a un jefe.