Muchos casos de "vampirismo" fueron realmente producidos por diversas enfermedades.
Oficialmente, los vampiros no existen, pero sí la fascinación por el vampirismo. En Internet no es difícil encontrar páginas ofreciendo intercambios de sangre o fiestas vampíricas. Ahora, un libro desvela las razones de la supervivencia del mito.
Explicaciones
Los supuestos casos reales que han existido tienen algún tipo de explicación. Generalmente se asocia con enfermedades como la rabia o la pelagra. Hoy, en el mundo se conocen como hematófagos, comedores de sangre.
Muchos adolescentes juegan a ser vampiros y una pareja de Alemania mató a un amigo suyo hace cinco años durante un ritual, pero según los médicos, beber sangre ni revitaliza ni vigoriza.