
GSK ha convencido al Ministerio de Sanidad para la financiación de Omjjara, un fármaco oral para controlar la esplenomegalia —agrandamiento del bazo— y la anemia en los pacientes con mielofibrosis, un tipo de cáncer de la sangre poco frecuente. De hecho, solo hay unos 4.000 pacientes en España. De esta forma, el fármaco de GSK competirá directamente con Jakavi, de Novartis, que se usa en esta misma enfermedad.
"Es el primer fármaco aprobado en Europa para tratar estos síntomas de la patología. Con él, reforzamos nuestra presencia en oncohematología, una de nuestras prioridades. Hemos invertido mucho en estos años para aportar soluciones en enfermedades que no tienen cura, tanto en este campo como en oncología en general", ha señalado la directora médica de GSK, María José Muñoz-Juárez, en rueda de prensa. Hasta ahora, la enfermedad no contaba con una alternativa terapéutica satisfactoria para los pacientes con anemia. Además de los síntomas mencionados, el fármaco también ha demostrado eficacia en otros como el cansancio, el malestar y la pérdida de peso.
El medicamento de GSK no es un desarrollo de la farmacéutica, sino que responde a la estrategia de adquisiciones de la británica. Hace dos años, la multinacional desembolsó unos 1.750 millones de euros para hacerse con la biotecnológica Sierra Oncology, que tenía a este fármaco en últimas fases de desarrollo clínico.
Cabe destacar que el tratamiento está indicado tanto en pacientes recién diagnosticados como en aquellos tratados previamente con el estándar de tratamiento existente. Precisamente, una de esas terapias que ya estaban aprobadas en España es la ya mencionada de Novartis, que supone uno de los medicamentos más vendidos en la categoría terapias huérfanas (aquellas dirigidas a un grupo reducido de pacientes). Con él, Novartis facturó 1.936 millones de euros a nivel global, un 14% más que en 2023.
La mitad de los pacientes necesitan transfusiones
Como se ha recordado en la presentación del fármaco de GSK, casi la mitad de los enfermos necesitan transfusiones. Esta cifra que se incrementa a medida que avanza la enfermedad, impactando directamente en su calidad de vida. "Hasta ahora hemos tenido un grupo de fármacos que nos han ayudado mucho a mejorar la vida de los pacientes. Eran tremendamente eficaces para esto, pero no impactaban en la anemia", ha explicado por su parte el doctor Valentín García Gutiérrez, especialista en Neoplasias Mieloproliferativas Crónicas del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Ramón y Cajal (Madrid).
Según se demostró en los ensayos clínicos, un grupo importante de pacientes que eran dependientes de transfusiones de sangre podían no volver a necesitar transfusiones durante un largo periodo de tiempo. "El hito es la independencia transfusional", insiste, poniendo el valor el ahorro de recursos que supone para el Sistema Nacional de Salud.
Ensayos clínicos realizados en España
España ha jugado un papel de liderazgo en los ensayos clínicos de este fármaco. Tal y como ha señalado García Gutiérrez, es un hito poder ofrecer moléculas innovadoras "que no están disponibles de ninguna otra manera" a los pacientes. "Que sigan confiando en nuestros centros de excelencia es una satisfacción desde el punto de vista a académico", ha dicho.
En total, casi 50 pacientes se han beneficiado de la realización de estas pruebas en España. "España es de los países más reclutadores, y esto nos ha dado la oportunidad de familiarizarnos con los fármacos", ha señalado.