CHICAGO, EEUU (Reuters) - El láser - un invento de hace 50 años actualmente utilizado tanto en los discos compactos como en complejas cirugías oculares- encontró su reverso en el "antiláser", el primer dispositivo capaz de capturar y cancelar sus rayos.
Aunque un dispositivo como éste parecería de película de ciencia ficción, su aplicación en el mundo real probablemente se dé en los ordenadores ópticos de próxima generación, que usarán luz además de electricidad, dijeron investigadores estadounidenses.
Los ordenadores ópticos cuentan con fotones, además de electrones, para manipular, almacenar y transmitir datos.
El antiláser "es un dispositivo que básicamente funciona como haciendo retroceder a un láser", dijo A. Douglas Stone, de la Yale University, quien publicó sus hallazgos en la revista Science.
Mientras que un láser toma energía eléctrica y emite luz en un rango de frecuencia muy delgado, dijo Stone, el antiláser toma luz láser y la transforma en energía calórica, que puede ser fácilmente convertible en energía eléctrica, añadió.
Los láseres convencionales, que fueron inventados en 1960, usan un material semiconductor para producir un rayo de luz focalizado de ondas lumínicas. El dispositivo de Stone usa silicona como absorbente para atrapar las ondas de luz, que rebotan hasta ser convertidas en calor.
No obstante, este antiláser nunca podría usarse como un posible escudo. "Esto es algo que absorbe el láser, Si un arma busca matarte, va a matarte", dijo Stone.
El experto dijo que el uso más obvio de su dispositivo es en computación. "La próxima generación de ordenadores de alto rendimiento tendrá chips híbridos", indicó Stone.
En lugar de tener procesadores con transistores y silicona, usarán tanto la luz como la energía eléctrica.
Stone manifestó que el dispositivo podría usarse como una especie de interruptor que pueda ser prendido y apagado a voluntad. Finalmente, añadió, la tecnología hallará su camino en la radiología.