NUEVA YORK (Reuters) - Si se avecina una pandemia de gripe, pero tiene que salir a la calle, hay una manera creativa de expresar el miedo.
Esa parece ser la visión de DIGO, una agencia de publicidad de Nueva York que está detrás de unas divertidas máscaras de diseñadores que permitirán a la gente destacar entre la multitud mientras intentan eludir la nueva variedad del virus de la gripe.
"Cuando vimos el pánico en torno a la gripe, pensamos que convertir una mascarilla facial, este símbolo del temor, en un lienzo para generar sentimientos más creativos o lúdicos era una manera de decir 'no tenemos nada que temer más que al miedo en sí mismo'", apuntó Mark DiMassimo, presidente ejecutivo y jefe creativo de DIGO.
"La vida continúa, diviértete, exprésate. Si quieres ser cuidadoso, no hagas que tu vida sólo se trate de eso", dijo DiMassimo, quien prevé una serie de 25.000 mascarillas a un valor de 100 dólares cada una, junto a un certificado de autenticidad que garantiza que forman parte de la primera edición.
En una variación de las mascarillas que podrían volverse un objeto omnipresente en las ciudades estadounidenses antes de que la epidemia siga su curso, la versión DIGO viene con seis diseños, incluyendo la favorita de DiMassimo, una que simula que la persona que la emplea está fumando a través de ella.
Otras tienen labios rojos, un hocico de cerdo rosa con un símbolo de prohibido, un bigote negro, la frase "No soy yo, eres tu" y su opuesto "No eres tú, soy yo".
"Estamos diciendo básicamente que algo funcional puede ser también una forma de autoexpresión", dijo DiMassimo, quien insistió en que las mascarillas, si bien graciosas, tendrán calidad médica.
Se venderán en la web de DIGO antes de que se expongan en una web especial. Finalmente, estarán disponibles en tiendas a un precio más bajo, dijo DiMassimo.
Los especialistas médicos aconsejan a la gente que se lave las manos frecuentemente, se cubra al toser y estornudar, y permanezca en casa si están enfermos para evitar un avance de la variedad del virus. En general, están de acuerdo en que las mascarillas, especialmente las quirúrgicas que se ven en las calles de México, ofrecen muy poca protección.