
La posibilidad de realizar un trabajo multidisciplinar en la red, la gestión digital de la información y las nuevas técnicas de imagen para diagnosis son algunos de los avances que la digitalización ha permitido implementar en los hospitales. Estas herramientas han supuesto avances a la hora de diagnosticar y tratar a los enfermos. oncológicos y conllevan una mejora en la supervivencia.
La posibilidad de conocer de forma anticipada la capacidad de metástasis del tumor, su clasificación y características, así como la optimización de los recursos sanitarios, la reducción de costes y tiempo de espera, suponen ventajas muy importantes derivadas especialmente de los nuevos protocolos que se combinan con los nuevos tratamientos así como de los equipos tecnológicos de los que pueden dotarse los hospitales.
Un ejemplo de gestión de la información que se está implementando en los hospitales gracias a la innovación, y concretamente al Big Data, es la anatomía patológica computacional, que se utiliza para compartir diagnósticos entre diferentes profesionales sin que exista la necesidad de trabajar en el mismo centro, por lo que será más sencillo trabajar con distintos especialistas y recibir segundas opiniones. Por ejemplo, el servicio de Anatomía Patológica del Hospital de Sevilla diagnostica aproximadamente 200 nuevos casos de cáncer de próstata al año.
Este centro, en colaboración con el Hospital de Valme, han desarrollado un proyecto que se sirve de la inteligencia artificial para diagnosticar el cáncer de próstata con un 98% o 99 % de precisión. Este tipo de tumores afecta a más de 35.000 hombres al año en España y existen otros proyectos de investigación, como los impulsados por la Unidad CRIS de Cáncer de Próstata (financiados por CRIS contra el cáncer). Esta es una unidad multidisciplinar, dirigida a la investigación y atención a pacientes afectados con cáncer de próstata a través de, entre otros, la secuenciación del material genético de los tumores y de los pacientes, averiguando si es portador de una mutación familiar que le predisponga a padecer cáncer.
Otros hospitales también están avanzando a través de la innovación hacia la mejora de la supervivencia de los trabajadores. Es el caso de los centros médicos públicos La Paz y Ramón y Cajal, que adquirieron hace dos años dos equipos de alta tecnología: el primero de ellos instaló un novedoso sistema de radioterapia pionero en España y el segundo un acelerador lineal con un brazo robotizado para radiocirugía y radioterapia estereotáxica corporal.
El Hospital de Salamanca, a su vez, ha incorporado de forma reciente un secuenciador masivo para aplicar terapias cada vez más personalizadas a los pacientes. Esta tecnología permite incidir sobre las alteraciones moleculares de los distintos tumores.
Hace dos años, el hospital Universitario de Fuenlabrada puso en marcha la iniciativa InnovaHonco, que cuenta con la participación de más de cien profesionales con el objetivo de buscar un mejor bienestar de los pacientes oncológicos mediante nuevos protocolos y líneas de actuación.
El plan estratégico tiene varias fases que comenzaron con medidas de renovación de las instalaciones (las consultas, la sala de espera, los circuitos, etc.), las cuales se complementaron con la telemedicina para mantener una comunicación fluida con los pacientes.
Por último, Sanidad ha anunciado recientemente que 14 nuevos centros ofrecerán terapias avanzadas CAR-T contra enfermedades graves como el cáncer, duplicando el número de hospitales que facilitaban este tipo de tratamiento.