La multinacional estadounidense trata de exprimir su fuerte posicionamiento en Norteamérica y China de cara a una reestructuración en otros mercados. La compañía luce unos fundamentales envidiables; en concreto, los más de 18.500 millones de dólares que acumula en tesorería le facilitarán la labor. Anuncia nuevos o renovados vehículos en China y Norteamérica mientras espera alcanzar ventas que supongan un 2% de todos los automóviles vendidos en el planeta, algo que podría lograr si se cumplen las previsiones realizadas por la empresa, que calcula venderá 16,5 millones de automóviles en Estados Unidos durante 2014.
4,4 millones de dólares anuales podría parecer un sueldo desorbitado, pero Mery Barra no dirige una compañía cualquiera: esta elevada cifra será la que reciba la nueva directora ejecutiva -y primera mujer en ostentar este cargo en una compañía automovilística- de General Motors (GM.NY), uno de los valores que mejores fundamentales lucen del parqué estadounidense.
Y es que las intenciones de tomar o fortalecer posiciones en nuevos mercados no parecen una utopía si se trata de General Motors. A pesar de los graves problemas que atravesó la compañía en 2009, cuando tuvo que ser rescatada, ahora aparece como uno de los valores más interesantes del S&P de cara a encontrar alzas en su precio: ningún analista entre los que recoge Bloomberg aconseja desprenderse de sus títulos, y esto lleva siendo así desde octubre de 2013. Además, según el consenso de mercado recogido por Factset aparece en el puesto 30 del selectivo por el fuerte consejo de compra que consigue.
Eso sí, las fortalezas de General Motors distan mucho de quedarse ahí: los más de 7.300 millones de dólares de beneficio que alcanzará durante el curso actual supondrían un incremento del 36% respecto de los que obtuvo en 2013. Estos fuertes beneficios son los responsables de la elevada caja que acumula la estadounidense, ya que acumula más de 18.500 millones en sus arcas, un colchón que podría dar pie a llevar a cabo nuevas operaciones corporativas y que la presenta como la octava compañía del todo el S&P con mayor tesorería acumulada.
De hecho, según declaraciones de Dan Ammann, director financiero de la compañía "el asunto principal para 2014 radica en aprovechar nuestra fortaleza en Norteamérica y China para reestructurar la actividad en otros lugares". Los 15 nuevos vehículos -o modelos renovados- que se han anunciado para incorporar en Estados Unidos, además de los 17 que entrarán en China son uno de los pilares en los que basa su estrategia la automovilística.
Además del sólido consejo de compra que mantiene la compañía, acumula el puesto 29 de todo el selectivo S&P en cuanto a la media de las previsiones de beneficio para 2014 que recoge Factset, el decimonoveno puesto por ratio Ebitda y potencial y la octava ratio PER más atractiva para el inversor.
Además, si se cumplen las previsiones lanzadas por los expertos para la presentación de resultados que realizará la compañía el próximo 6 de febrero, los 0,876 dólares de BPA (beneficio por acción) que se embolsará supondrán alcanzar el máximo desde su rescate, incrementando en un 73% el BPA más elevado que se embolsó durante un cuarto trimestre: los 0,506 dólares alcanzados en 2013.