Cada día las 'familias' en las que se ha dividido el PSOE de cara su próximo proceso de primarias para decidir la nueva Secretaría General deparan un enfrentamiento, una anécdota y a veces, incluso, una posible alianza.
Esta última posibilidad, pese al continuo cruce de declaraciones, es un escenario que contemplan algunos círculos del sector que apoya a Pedro Sánchez con respecto a la candidatura de Patxi López.
Según informa Okdiario, aunque Sánchez y sus afines interpretasen como una traición la marcha de algunos de los cercanos al ex secretario general al entorno del ex lehendakari y aunque el anuncio de la candidatura de López con tanta anticipación con tal de frenar al exlíder en las primarias no sentó bien, desde el principio los 'sanchistas' han tenido claro que el rival a batir es Susana Díaz y que ambas candidaturas, aunque con matices, comparten el 'no' al PP.
Esto ha provocado que desde el principio de la carrera de primarias se hablase de una unión de ambas candidaturas alrededor de la figura de López como más proclive a un futuro consenso dentro del partido que la de Sánchez. gastada en las disputas que lo costaron el liderazgo.
Sin embargo, según transcurren las semanas, el avance de la candidatura de Sánchez y el estancamiento de la de López, algo que se evidencia en la asistencia a sus actos, ha provocado que algunos próximos al exlehendakari y expresidente del Congreso hablen ya de tender puentes con Sánchez para contrarrestar a Díaz. Una posibilidad que los 'sanchistas' aplauden siempre que Sánchez quede como cabeza de cartel y siempre que se produzca muy al final del proceso de primarias.
Desde el entorno de López se insiste en que éste va a llegar "hasta el final" digan lo que digan. No obstante, barones autonómicos como la presidenta balear Francina Armengol no esconden su preferencia porque ambas candidaturas lleguen a un acuerdo, se produzca éste en los términos que se produzca.
Al parecer, dentro también de la candidatura de López hay muchos "arrepentidos" que ven que su iniciativa se desinfla ante el peso de Sánchez y Díaz y que ven que pueden quedarse fuera del reparto de cargos una vez culmine el proceso cuando López, por ejemplo, mantendría su escaño en el Congreso de los Diputados.
Esta serie de rumores preocupan a los 'susanistas', que saben que si ya se les antoja contrarrestar la imagen de Sánchez entre las bases, sería muy difícil ganar a una alianza entre los críticos con la Gestora y el diálogo con el PP.
De la misma manera, también preocupan los contactos mantenidos por Sánchez con dirigentes y exdirigentes que no son de su cuerda, pero que han accedido por tender puentes en un PSOE más dividido que nunca.
Según el citado medio, Sánchez ya ha comido con el diputado madrileño Rafael Simancas, afín a él pero que al final se abstuvo ante el PP o el presidente extremeño Juan Carlos Ibarra, muy crítico con él, pero al que en su momento pidió respaldar como líder del PSOE que era.
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