
El alcalde socialista de Vigo no es sospechoso. Desde el primer día, hace algo más de dos años y medio, mostró su entusiasmo por el liderazgo de la presidenta andaluza, Susana Díaz, la mujer que está en boca de todos los corrillos políticos, y el nombre más esperado para completar la terna de las primarias del Partido Socialista.
A la espera de que mueva ficha, "porque no es normal que estemos en primarias cinco meses, ya que aquí se va a cansar hasta el apuntador", reprocha Caballero al resto, la estrategia de la dirigente andaluza pasa, al estilo marianil, por "medir los tiempos". "Aunque no seré yo quien diga cuando se tiene que presentar", matizó.
La incertidumbre de los avales
Pero "hay tiempo" -argumentó el edil gallego-. Sobre todo cuando el problema es que, por ahora, hay dos pre candidatos, que no candidatos, que dijeron que cuando se abriera el plazo optarían a conseguir los avales. Y de repente nos vemos en una campaña hablando a lo ancho y lo largo de toda España, en la que no se sabe si van a tener avales. Podría decirse -analizó- que este manera de actuar es singular. Y puede que aquí haya gente que ha decidido que en lugar de ser singular, es mejor cumplir con la norma", declaró en alusión a Susana Díaz.
Confiando en que prospere la candidatura de Díaz, y , "esperemos que se presente, esperemos que se presente", llegó a decir Caballero hasta en dos ocasiones, el presidente de la Femp aseguró que su intuición, la de que Susana se embarcará muy pronto en una nueva andadura, "se basa en datos y no en hipótesis, porque yo solo trabajo con datos", mantuvo.
El día de las urnas
En respuesta al poder de convocatoria que se le atribuye a Pedro Sánchez, Caballero recordó el acto, organizado por él mismo, en el que la jefa del Ejecutivo andaluz "fue capaz de convocar a más de mil alcaldes socialistas", demostrando -puntualizó- "algunas cosas evidentes y manifiestas", y es "quién es capaz de convocar a mil ediles de ayuntamientos importantes en términos de población, sin olvidar que, aparte de alcaldes son militantes de base como soy yo". Por tanto, "esa teoría de los militantes de base y los no de base, haciendo diferencias en los votos, es un invento interesado". De manera que -remató-, cuando la militancia hable ya se sabrá quién es el candidato de la militancia".