
El presidente de CDC y ex presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha asumido que todavía no hay "suficientes" catalanes que apoyan la independencia, y ha marcado como objetivo que "en los próximos tiempos, en Cataluña se traspase la barrera del 50% de votos a favor del Estado catalán".
"No somos suficientes, tiene que haber más gente (independentista), porque, si no, siempre nos quedaremos a unas cuantas millas de ese puerto de llegada", ha dicho expresidente catalán.
Mas ha reivindicado que CDC se haya convertido en los últimos años en un partido independentista: "Es el partido que más ha roto los moldes de hacer siempre lo mismo, no hemos seguido apostando por una autonomía supeditada a los equilibrios del Estado", ha dicho el dirigente nacionalista.
"Si queremos que esto llegue a buen puerto, rompiendo el hielo que haga falta, hace falta que en algún momento haya más de un 50 % de personas que vayan a las urnas y digan que están a favor del Estado propio", ha recalcado Mas.
El referéndum, escollo entre PSOE y Podemos
Mas ha asegurado asimismo que el principal escollo entre PSOE y Podemos para llegar a un acuerdo de Gobierno "se llama Cataluña, se llama referéndum y derecho a decidir y, en definitiva, ejercicio democrático".
Lo ha dicho en su intervención en la clausura de la Convención Nacional de la JNC, donde ha señalado que es "sorprendente y decepcionante" que la formación política que ha ganado las elecciones generales no se atreva a ir a la investidura, y que los que las han perdido pacten con aquellos que, según él, no deberían ser los primeros con los que llegar a un acuerdo.
El ejemplo catalán
"Hay una mayoría de izquierdas que no es operativa, que no se quiere ni hablar, algo muy progresista", ha ironizado Mas, y ha insistido en que si España fuera Alemania ya se estaría hablando de una gran coalición entre PSOE y Podemos, mientras que si España fuera Cataluña el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ya estaría pensando en hacer un paso al lado para permitir la gobernabilidad.
Mas ha afirmado que CDC no apuesta por la repetición de las elecciones generales, y ha aseverado que en la política española hay posibilidades de solucionar la situación si los actores tienen "sentido de Estado, altura de miras y cintura".